Ciencia de la Biodiversidad y el Cambio Climático | "Tarea 1"

Instrucciones

Elige una de las técnicas usadas para reconstruir el clima del pasado y explica en qué consiste, qué resolución nos da y su fiabilidad.

 

Discusión

Existen varias técnicas para poder valorar el contenido de gases atmosféricos en el pasado.

Una de estas técnicas se basa en el crecimiento de materia vegetal, a través del reconocimiento de las características de los anillos que crecen en la corteza de los árboles de distinta edad. 

Así, podemos observar distintas características como el grosor de los anillos, que indicaría el régimen de crecimiento de la corteza, como consecuencia de las lluvias del año correspondiente. Años más secos darían lugar a anillos relativamente más finos.

Como en la "serie estratigráfica" en el terreno, es posible casar un patrón de anillos entre distintos troncos de árboles más jóvenes y más antiguos, lo que ampliaría la ventana de épocas en las que podríamos hacer este análisis.

Otra forma de obtener información más detallada de la composición de los gases de la atmósfera se puede ver en los testigos que se pueden extraer de acumulaciones de hielo, esta vez en escalas de tiempo bastante mayores que las que son posibles a partir de los anillos de los árboles (centenares de años o unos pocos milenios en el caso de los anillos de troncos de árboles, comparado con centenares de miles o hasta millones de años en el caso de los testigos de hielo). Así los gases encerrados en el hielo de glaciares o en la Antártida pueden revelar una relación entre la abundancia de estos gases y la posición en la columna de hielo que depende del tiempo en que estos gases hayan quedado encerrados en el seno del propio hielo.

A través de la abundancia relativa de los distintos gases en la atmósfera se pueden alimentar modelos climáticos que pueden predecir el efecto invernadero que se estaba dando por aquella época, combinado por supuesto con las condiciones de irradiación solar conocida la órbita de la Tierra alrededor del Sol por aquel entonces (ya que el clima al final es un equilibrio entre la radiación recibida en última instancia del Sol y la que se emite desde la Tierra, lo que dará lugar a distintas temperaturas de equilibrio en cada momento debido a las diferencias en el efecto invernadero correspondiente para una composición determinada de la atmósfera).